Una partida de 24.000 botellas de 'Menciño' serán el ariete
de los vinos DO Valdeorras en el mercado brasileiro. Así se anunció la pasada
semana por parte de la Bodega Cooperativa Jesús Nazareno quién, de mano de
su presidente Manuel Fernández Pérez, explicó que el departamento de exportación de la sociedad
ultima en estos momentos los detalles de la operación.
La cooperativa de O Barco, al igual que la gran mayoría de
bodegas DO Valdeorras en los últimos años, hace tiempo que apostó por los mercados
exteriores y de ahí su presencia en países como Estados Unidos, Alemania,
Holanda o Suiza, según comentó su presidente. Añadió que la búsqueda de nuevos
clientes no se limita al extranjero y que Jesús Nazareno lleva años trabajando
con las grandes cadenas de alimentación
nacionales, con resultados bastante alentadores.
El buen momento de la bodega cooperativa es refrendado por
los datos de ventas; 'este mes llevamos vendidos 20.000 euros más que el año
pasado', explicó Manuel. De esta manera se confirma el gran prestigio que los vinos DO
Valdeorras han logrado en los últimos años y que se basa en su gran relación
calidad precio.
A la gran calidad de los vinos hay que sumar el aumento
de las ventas, que es posible gracias a la elevada producción de la bodega. Según los datos facilitados por su presidente, en sus instalaciones entraron
aproximadamente 1,8 millones de kilos de uva, siendo por ello que este año los
depósitos no fueron suficientes para almacenar tanto mosto y hubo que
introducir una partida de 70.000 litros en varias cisternas complementarias.
La gran expansión de la bodega ha llevado a que los resultados de los últimos
ejercicios permitieran amortizar la creación de nuevas instalaciones, haciendo
que la directiva sopese, de forma firme, la posibilidad de repartir el capital
social y permitir la entrada de nuevos asociados.
La gran aceptación por parte del consumidor de los vinos DO
Valdeorras, unida a la actual situación socioeconómica, han propiciado la recuperación de viñedos que
llevaban años sin trabajar, replantando las variedades autóctonas de Valdeorras. De esta manera se abre la posibilidad de afiliación de nuevos asociados.
Con ello se consolida un plan de expansión continuista, que
basa su evolución y desarrollo en la elaboración de unos vinos de primerísima calidad a un precio muy competitivo.
Manuel Fernández accedió a la presidencia de Jesús Nazareno
en 1986 y continuará cuatro años más, después de que la asamblea de socios lo
ratificase, hace dos semanas, en su cargo al frente de la cooperativa.
En los planes a corto plazo de Jesús Nazareno entra la
recuperación de las viejas instalaciones de la cooperativa, aquellas de las que
salió su primer vino en 1963. Con ello, pese a que es una posibilidad que la
junta rectora todavía está estudiando, las dificultades para encontrar la financiación que
permita afrontar el proyecto de forma global, dificultan su implementación a
corto plazo. Sin embargo, la ejecución del proyecto en varias fases, permitiría afrontar la inversión de
forma más holgada.
De esta forma, sin prisa pero sin pausa –igual que el proceso de elaboración del buen
vino- , las bodegas DO Valdeorras siguen ampliando su prestigio y
reconocimiento tanto a nivel nacional como internacional, ratificando la
máxima que considera a los vinos DO Valdeorras como "la revolución enológica del
siglo XXI".